Trampa 1: A pesar de que la Comunidad de Madrid, por medio de su Informe de Impacto Territorial, limita el nº de nuevas viviendas en Alpedrete a 1114, el PGOU propone 1735, un 55% más de lo permitido. Esto supone un aumento en la población de Alpedrete de un 35% sobre el año 2009.
Trampa 2: Se amplía el casco urbano en una medida muy superior a la anunciada en las diferentes versiones anteriores del Plan. De las 79 viviendas planeadas, se propone ahora la enorme cantidad de 249. Ninguno de los informes y previsiones del Plan tiene en cuenta esta ampliación para sus previsiones (necesidades de agua, saneamientos, estudio de tráfico, estudio ambiental, etc.)
Trampa 3: El PGOU propone una gran desagregación y fraccionamiento de los terrenos dotacionales y zonas verdes. Se percibe que el lucro de los promotores es su principal finalidad, por lo que los terrenos públicos se sitúan en las zonas de menor calidad y valor económico.
Trampa 4: Por medio de un cambio en las normas urbanísticas se aumenta la edificabilidad de las colonias (El Carmen, Las Colmenillas y Los Negrales). El aumento de viviendas y población que este aumento conlleva no está contemplado en ninguno de los informes y previsiones del Plan (agua, saneamiento, contaminación, tráfico, etc.)
Trampa 5: Además del nuevo sector urbanizable “Los Llanos-Sur”, con 807 viviendas, se permite, por medio de diferentes recalificaciones, la construcción de otros 157 chaléts a los dos lados de la carretera M-620 (Alpedrete-Los Negrales), que se convertirá en un vial atestado de tráfico.
Trampa 6: En el nuevo sector urbanizable “Arcilleros Norte” no se respeta el mandato de la Comunidad de Madrid de calificar el norte del sector como Suelo No Urbanizable de Protección, sino que lo utiliza para incorporar en él las zonas verdes y así aumentar la edificabilidad en el resto del sector, que queda sin la distribución regular de zonas verdes que exige la ley. Además, no se respetan las Vías Pecuarias que atraviesan el sector.
Trampa 7: En la ampliación del polígono industrial hacia el norte de la Dehesa, se utilizan espacios libres fruto de recalificaciones anteriores (pero posterios a las Normas Subsidiarias de 1994 y por tanto no recogidas en esa ordenación) para “generar” zonas verdes y espacio público pretendidamente nuevo, en vez de, como exige la ley, reservar realmente nuevo espacio público en los nuevos desarrollos.
Trampa 8: El sector “Cerca de los Robles” pasa directamente de No urbanizable Especialmente Protegido por Masa Forestal a Suelo Urbano, infringiendo la ley que exige que se demuestre la pérdida de sus valores naturales, y por tanto se declare primero como Urbanizable y sólo posteriormente como Urbano. Además, no se respeta la vía pecuaria que pasa por el sector.
Trampa 9: Los Llanos-Sur, un ghetto para la vivienda protegida. El nuevo sector SUS R 01 “Los Llanos Sur”, donde van previstas 807 viviendas, un 45% de las cuales con algún tipo de protección, se proyecta como un gran ghetto con una escasísima calidad medioambiental y una accesibilidad dificilísima. Sus principales problemas, aparte de la brutal masificación, son:
•Nula accesibilidad desde el centro del pueblo y por tanto ningún provecho económico para comercios y servicios locales;
•Dificultosa accesibilidad a las salidas hacia Madrid, es decir, serios problemas de tráfico y movilidad, a pesar de que se plantea específicamente como un sector-dormitorio;
•Incumplimiento de todas las normativas sobre ruidos, tanto nacionales como europeas. Las soluciones que se proponen son impracticables y recaen en terrenos de otras administraciones;
•Graves problemas de inundaciones y saneamientos;
•Se incluyen en el sector la red de vías pecuarias y el Arroyo de los Linos, cuando en realidad son espacios No Urbanizables de Protección, y se arrinconan en ellos las zonas verdes. De este modo, se aumenta fraudulentamente la edificabilidad del sector, que queda en la práctica como un enorme espacio de edificios sin zona verde alguna.
En resumidas cuentas: un sector-basura, dormitorio, cerrado y aislado del pueblo, donde irá la vivienda protegida que hasta ahora el Ayuntamiento tenía prevista en otras zonas ya urbanas y no ha querido construir.
Trampa 10: El PGOU no precisa las compensaciones en materia de reforestación que impone la ley como contrapartida por los terrenos forestales que se recalifican. De hecho, el municipio de Alpedrete no tendría terreno suficiente para acoger la totalidad de estas compensaciones.
En conclusión, todas las trampas van en la dirección de aumentar el lucro de propietarios, promotores y constructores a costa de un desarrollo sostenible y de la calidad de vida y del medio ambiente en el municipio.
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