La aprobación inicial del Plan General de Ordenación Urbana ha dado un paso importantísimo por parte del equipo de gobierno del Partido Popular junto al grupo municipal del partido independiente UNPA.
Hasta aquí ha llegado el compromiso del que ha hecho gala durante mucho tiempo el partido Unión del Pueblo de Alpedrete con respecto a la participación ciudadana en la redacción del PGOU. Del PP no podíamos esperar otra cosa, pero el apoyo inicial a la aprobación de este PGOU por parte del UNPA ha causado estupor entre los vecinos.
Se han incluido cuatro modificaciones al documento que, según este partido, han hecho cambiar su postura ante un Plan General que ha carecido de consenso político. Han ignorado su promesa electoral, fomentar la participación ciudadana a la hora de redactar un PGOU, de manera descarada y ambos concejales han engañado no sólo a sus votantes, si no a todos los vecinos de Alpedrete. La Alcaldesa, Marisol Casado, para decepción de UNPA, no ha podido ni siquiera comprometerse a garantizar que dichas modificaciones fueran a ser incluidas en su totalidad en la redacción final de dicho Plan General, pero la falta de ese compromiso no a producido ningún reparo por parte de ambos representantes de esta formación.
El portavoz del UNPA, Julián Jiménez, ha intentado justificar su cambio de postura aludiendo responsabilidad política, poniendo en evidencia su incongruencia a la hora de criticar la redacción del PGOU y votando a favor del mismo en un mismo acto. La concejala de UNPA, Maria Angeles Paz ni lo ha justificado, simplemente a votado afirmativamente sin ruborizarse lo más mínimo. Se ha quedado muda durante las más de cuatro horas que ha durado el Pleno extraordinario, y eso que la concejala en cuestión ha sido la que ha provocado el cambio de postura inicial en el UNPA.
Las circunstancias del cambio de postura con respecto al PGOU por parte de UNPA hacen sospechar, una vez mas, que hay intereses personales en el seno de la corporación municipal, cuando hace tan sólo unos pocos meses que Maria Angeles Paz y Julián Jiménez apoyaron con sus votos la creación de una comisión de investigación para esclarecer una posible irregularidad que ha llevado al actual concejal del PP, Tomás Carrión Guillén, ha inhibirse en las votaciones que afecten al PGOU. La función política vuelve a estar en entredicho en nuestro municipio y de nuevo los intereses generales de los vecinos quedan estrepitosamente relegados a un segundo o tercer plano.
Con esta actuación se pone de manifiesto la falacia que suponen, en la práctica, los llamados partidos independientes, que sólo son verdaderamente independientes de sus votantes y del conjunto de los ciudadanos del pueblo al que dicen, hipócritamente, querer defender. Su patética y lastimosa actitud en el pleno de hoy defendiendo, quien ha hablado, algo en lo que no creía, y callando, con un silencio que no hubiera sido capaz de mantener el mismísimo Judas Iscariote después de consumar su traición, quien ha sido la responsable última, haciendo valer su condición de “dueña” del partido, de una de las mayores felonías y traiciones que ha sufrido, inmerecidamente nuestro pueblo. Las vergonzantes felonías políticas no sólo pasan factura en las urnas. Tendrá que vivir el resto se su vida con el orgullo de ser la responsable de el final del pueblo que todos conocemos hoy en día. Su tan “amado” pueblo llamado, Alpedrete. Nuestro pueblo.
A este PGOU todavía le queda mucha batalla y desde Izquierda Unida de Alpedrete seguiremos exigiendo un proceso participativo, transparente y alejado de los oscuros intereses que conlleva el actual plan.
Todo lo que ha ocurrido hoy nos anima a luchar con mas fuerza contra un PGOU que sólo favorece a los intereses de una minoría de los vecinos de nuestro municipio.
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